Ayudan a que el mantenimiento del arenero sea muy sencillo, sin tener que lavar en cada cambio de arena y evitando que se impregnen con malos olores. Este accesorio es desechable y posee la resistencia necesaria para soportar los granulos de arena que se requieran descartar de manera segura, cuando llegue el momento de cambiar toda la arena de la bandeja de tu gato. Basta con forrar la base del arenero con una de las bolsas de arena para gatos y luego rellenar la arena como de costumbre. Si hay que cambiar la arena, simplemente se puede retirar junto con la bolsa. El uso de bolsas de arena para gatos evita que la orina se deposite en el arenero y, por tanto, que se acumulen los malos olores. Además, la vida útil del arenero aumenta porque el material plástico no entra en contacto directo con los excrementos del animal. Las bolsas están equipadas con un cordón para fijar la bolsa y cerrarla antes de su eliminación
Hechas con 40% material reciclado.
Cuenta con un diseño confiable resistente al desgarro.
Funciona muy bien con areneros abiertos y cerrados